jueves, 15 de enero de 2009

"Hija del Rigor" (2 parte)

No se trata de tiempo perdido.
Este tiempo entre dos límites, en el cual supuestamente no ocurre nada, no se lo aprovecha, internamente ocurren otros movimientos.
Se encuentran pensamientos, ideas, influencias, innovaciones,y quién sabe cuantas otras cosas; al fin y al cabo contribuyen, están trabajando fino, allí...donde quizás nosotros mismos nunca lleguemos, para poder completar la idea del trabajo a realizar.
Suele pasar que se necesita de este tiempo, superficialmente desaprovechado, para armar la obra en la cabeza y luego vomitarla en algún rincón.
Me sentí totalmente identificada, con lo que dijo Víctor Agú (escritor de radio, teatro y televisión), al responder la pregunta de ¿en qué momento se decide a escribir? ,y mencionó algo así como: a contra reloj; antes de ponerse a escribir da vueltas, toma café, hace aquello, va de un lado para otro, él dice estar seguro de que llegará a entregar el trabajo, por eso se siente tranquilo, aunque lo haya terminado por la madrugada.
Escucharlo hablar, en la manera que describía esta situación, era como si contara lo que muchas veces me ha ocurrido.
No quiero justificarme, ni tampoco asegurar que siempre resultará, pero sirve para contar de la manera en que a cada uno nos gusta trabajar.

1 comentario:

  1. me acordé de esta publicación hace unos días por un laburo a contra reloj... y me pasé de nuevo por acá. salud guille!

    ResponderEliminar